Día 5: Naranja (Sonic the Hedgehog 2)

Las colas mitad naranja ondeaban mientras aceleraba su paso por Green Hill Zone.

Su compañero, un erizo azul llamado Sonic, marcaba el rumbo imponiendo un alto ritmo en su avance.

Habían recolectado un buen número de anillos, sin embargo ahora se encontraban en un apuro.

Todo había comenzado cuando ambos compañeros, Sonic y Tails, el zorro naranja y blanco, se habían arrodillado para posteriormente comenzar a dar vueltas sobre sí mismos.

El cuerpo del erizo rotaba a tanta velocidad que su silueta se antojaba elíptica, mientras que la bola que era Tails dejaba asomar sus colas, los dos listos para arrancar en cualquier momento.

Y vaya si lo hicieron. Salieron propulsados recorriendo el verde paraje haciendo tirabuzones a tal velocidad que mantenían su calzado quemando la tierra que pisaban. Varios loopings después, iban tan rápido que sus cuerpos parecían salirse del horizonte que divisaban.

Hasta que Sonic chocó frontalmente con un pescado que saltó chapoteando de un pequeño lago en el momento más inoportuno.

Tails contempló como docenas de anillos se esparcieron a su alrededor, tratando de conseguir repescar algunos.

En su intento, cayó por una pendiente sin ser consciente de que el filo desgarrador de unos letales pinchos le aguardaba más abajo.

De modo que perdió los anillos y su vida, instantes antes de resucitar al lado de Sonic, que pese a sentirse mejor al ver el naranja reluciente el cuerpo de su amigo, quedó recto contemplando el camino que les esperaba, pues sin anillos recolectados sus peligros suponían una amenaza aún mayor.

Sin embargo emprendieron el camino, y aceleraron el paso.