martes, 30 de diciembre de 2014
Club adopta un blog
Me apunto a esta iniciativa que trata de ayudar a despegar a pequeños blogs.
Para más información clicka aquí.
Pronto anunciaré nuevo padrino ^^.
¡Un saludo!
lunes, 29 de diciembre de 2014
Chihiro
Tengo cuatro meses y vivo en una jaula.
Cuando vienen a verme no me llaman por
ningún nombre, hacen unos sonidos extraños y yo siempre me lanzo a
la verja para intentar abrazarles.
Tengo unas buenas uñas, pero con ellos
no suelo sacarlas.
Me gusta mucho jugar.
Solo vienen por la mañana, luego los
otros gatos me empujan, me arañan y me muerden cada vez que intento
beber un poco de agua o saciar mi hambre.
De vez en cuando un hombre viene con un
tubo de plástico y llena la jaula de agua. Escalamos por donde
podemos para evitar mojarnos, pero casi nunca lo conseguimos.
Hoy un chico y una chica me han dado de
comer algo delicioso.
Han estado jugando conmigo pero no
se... se han ido y creo que no volverán.
Nunca nadie vuelve a por mi.
Es noche y hace mucho frío. Todo huele
muy mal y tengo mucha hambre.
A veces pienso que no vale la pena
seguir... Pero siempre por la mañana alguien me llama con ese sonido
y mueve su mano para que yo trate de cogerla.
Se escuchan unos ladridos horribles
todo el tiempo, sobre todo cuando las personas vienen a verme.
La verdad es que estoy asustada todo el
tiempo.
Pasan los días y las noches y no
encuentro ningún sitio que proporcione algo de calor.
Sin embargo, tengo un presentimiento.
Como si algo fuese a cambiar...
Cuando despertó, la gatita escuchó
gritar un nombre a unas voces que conocía bien. Chihiro decían. Y
sí, se dirigían a ella. Se desperezó y se abalanzó sobre la verja
para saludar a esa chica y ese chico que le daban de comer aquellas
cosas deliciosas cuando venían.
Él llevaba algo en la mano, y Chihiro
quiso desde buen principio meterse allí. Lo hizo y empezó a
ronronear sin parar. Ya nunca más dejaría de hacerlo.
Estuvo un buen tiempo en un coche
preguntándose qué estaría pasando, y tuvo que hacer en ese pequeño
lugar sus necesidades porqué ya no aguantaba más.
Luego todo aconteció muy rápido.
Llegaron a un lugar muy grande y
entraron en una pequeña estancia.
El chico cerró la puerta y por fin
abrió el transporte.
Mientras lo limpiaba, el mismo sonido
que salía del tubo de la jaula asustó a Chihiro, que nada pudo
hacer para evitar caer en un charco de agua tibia y verse frotada con
algo que picaba un poco.
Llegó la chica y la frotaron más y
más.
Finalmente una cascada de agua le quitó
esa cosa que tan bien olía.
La envolvieron en toallas mullidas y la
dejaron lista para que inspeccionase su nuevo hogar.
Mientras se acostumbraba, Chihiro veía
como sacaban cosas para que las atrapase y montaban algo muy grande
donde parecía que sus uñas iban a disfrutar mucho.
Me llamo Chihiro y he pasado ya dos
días en este fantástico lugar.
Nunca hace frío y tengo una comida
deshecha que me encanta.
Juegan mucho conmigo y no para de venir
gente a verme.
Nunca pensé que sería tan feliz.
Últimamente siempre escuchaba a las
personas decirse feliz Navidad. Yo no sabía a qué se referían si
siempre la cruel noche llegaba a mi.
Ahora lo entiendo.
La Navidad me gusta. Me llamo Chihiro,
tengo cuatro meses y por fin quiero vivir feliz.
viernes, 26 de diciembre de 2014
Otro viernes a las seis
Otro viernes a las seis:
Tema titulado "Me faltas tú" de "El sueño de Morfeo" en sus inicios.
Una de las cosas más melancólicas que me he echado a la cara.
Regalos de Navidad
La familia se juntaba siempre por
Navidad para celebrar todas las fiestas.
Las comidas y las cenas siempre iban
marcadas por esa ilusión que irradiaban esas fechas, y ante una mesa
muy bien presentada los miembros de la familia Deckard comentaban
anécdotas y reían sin reparar en el pasar de las horas.
Cantaban al karaoke y caían al sofá a
carcajada limpia escuchando las repeticiones de sus actuaciones.
Finalmente, llegaba la hora de los
regalos.
Se encerraban cada uno en una
habitación y minutos después las campanas de Papá Noel sonaban
para indicar que todo estaba listo.
Esas navidades fueron un espectáculo
de diversión e ilusión.
Con sendos whiskys en la mano, padre e
hijo se miraban cómplices y satisfechos al comprobar como la pequeña
Sandra recibía con suma alegría su regalo, una elaborada muñeca de
porcelana de ojos saltones y rubio cabello.
Ya no pudieron llamar más su atención,
tal era la obsesión que le cogió a la niña con la mirada de su
muñeca. Parecía durante el resto de la noche que hablaban a través
de su mirada, pues Sandra cogía con delicadeza a Sofie, que así la
llamó, para susurrarle cosas mientras la miraba fijamente a los
ojos.
Reían sin comprender lo que iba a
acontecer esa noche, cuando decidieron ir a dormir.
En el belén unos sonidos pasaron
desapercibidos para los Deckard. Se trataba de las figuras de los
reyes magos, que emitían extraños chasquidos hasta que, uno detrás
de otros, saltaron por los aires estrellándose contra el suelo.
Cuando Phillip Deckard, el hijo mayor,
se hubo tapado y se disponía a cerrar los ojos en su cama, escuchó
el tímido chirrido de la puerta corredera de su armario.
Extrañado, se puso en tensión.
Una vez más el sonido, y otra, y otra.
Finalmente, cuando ya se disponía a
levantarse, la puerta se abrió.
De inmediato notó unas pisadas sobré
su edredón, aplastando sus pies y piernas, como si una niña pequeña
estuviese gateando hacia él.
A grito limpio, se levantó velozmente
para horrorizado escuchar unas agudas voces en su cabeza. No,
provenían de la torre apagada del ordenador.
Abrió la puerta de su habitación y
las voces esta vez sí se incrustaron en su cabeza, estaba claro que
le perseguían.
Despertó a sus padres y les dijo lo
que estaba ocurriendo.
Cuando vieron las figuras de los reyes
magos por los suelos, extrañados, pensaron que la pequeña había
estado haciendo de las suyas. Philip no creía eso en absoluto.
Cuando entraron en la habitación de
Sandra la encontraron dormida, susurrándole a la muñeca Sofie. A
Philip, por un momento, le pareció que era la muñeca la que emitía
los susurros.
Finalmente, muy asustado aunque
aliviado, el hijo mayor escuchó de nuevo las voces mientras
comentaba los detalles de lo ocurrido a su padre.
Y Aaron también las oyó.
Surgían de una antigua cámara de
fotos.
Extrañados, rieron inconscientes y
fueron a dormir. No hubieron más sucesos extraños esa noche, que
ellos supiesen cuanto menos.
Por la mañana los padres de Philip
habían salido a comprar dejándole al cuidado de Sandra.
Cuando Philip salió del lavabo,
escuchó una simpática melodía que su hermana silbaba desde su
habitación.
Cuando pasó por delante vio la figura
de una niña pequeña, como si Sofie hubiese cobrado vida, mirando
ausente por la ventana mientras silbaba y silbaba.
Con los pelos de punta, Philip siguió
su camino.
Al fin y al cabo, era el regalo de su
hermanita.
jueves, 25 de diciembre de 2014
Al final del camino
Al final del camino:
Diferentes piezas compuestas para la trilogía de "El Señor de los Anillos".
Entre ellas la que acompaña a Frodo en el tramo final de su misión, cuando solo queda desesperanza :_(
Una rata en Navidad
Era de noche y la tienda de animales
permanecía cerrada.
Un frío intenso arremetía contra las
diferentes especies, pero en un rincón de la tienda, en la zona
reservada para roedores, una cálida luz emanaba de una de las
jaulas.
Una nueva esperanza había nacido.
Al llegar la Navidad la ratita tenía
apenas dos meses, tal era su belleza y su encanto que cuando la
hermana de un solitario sujeto la vio, no tuvo dudas de cual sería
el obsequio para su hermano en esas fechas.
Sorprendido e ilusionado al recibir el
regalo, una flamante jaula con todo tipo de accesorios, el hombre
cayó en la cuenta de la esperanzadora magia de la vida al levantar
su hermana un puente en miniatura y descubrir en su interior,
agazapada, una preciosa hámster llamada Hope.
Al día siguiente a la Nochebuena, el
hombre sacó a la ratita de sus aposentos para jugar con ella.
Era un encanto. Gateaba por su mano
escalando entre sus dedos, hasta posarse en su hombro y olfatear su
oreja.
En su hogar, la alegría de una época
feliz vino de parte de una esperanza que Hope irradió nada más
nacer en la tienda.
Huidiza esperanza
Víctor estaba severamente afectado.
Si bien el hámster que su hermana le
había regalado por Navidad le había hecho gran ilusión, una visión
relampagueante de su persona, solitaria en un lúgubre y oscuro hogar
con la rata, le había asaltado sin explicación.
Ya había tenido hámsters en el
pasado, de modo que cuando llegó a su casa con su nueva compañera
Hope, Víctor jugó un rato con ella y disfrutó viéndola hacer
girar su ruedecita, comiendo y bebiendo como buenamente intentaba la
criatura de apenas dos meses.
Tras eso, ya recuperado y más
contento, Víctor se fue a dormir.
Despertó de madrugada con la jaula en
las manos. Hope se ahogaba en arena. Cuanto más sacudía la jaula
para esparcirla, más se llenaba. Con sumo cuidado, agarraba a su
mascota con los dedos para así desenterrarla de una muerte segura.
Finalmente la dejó en el suelo.
Hope se movió, un metro apenas. Escapó
una y otra vez de su agarre saliendo a la calle tras cruzar la puerta
abierta. Pasó incontables horas persiguiéndola, hasta que
horrorizado vio como la ratita se colaba hacia un descampado.
Hacía frío, y persiguiendo a un
saltamontes y una lagartija, Hope se desvaneció.
miércoles, 24 de diciembre de 2014
La montaña de los enanos
La montaña de los enanos:
Tema compuesto para el film "El Hobbit: Un viaje inesperado".
Un violín para conquistarlos a todos
Un violín para conquistarlos a todos:
Lindsey Stirling pasea las notas de su violín sobre diferentes temas de la banda sonora de la trilogía del Señor de los Anillos.
Bilbo en la Tierra Media
Bilbo en la Tierra Media:
Tema de los créditos del film "El Hobbit: La batalla de los cinco ejércitos".
Mago: Precio
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Final del prólogo de Mago
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Mago: Colección
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martes, 23 de diciembre de 2014
Mago: Batalla
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Mago: Ymka
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Mago: Ventisca
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Mago: Afianzado
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Mago: Incendio
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Premio Liebster x2
Tulkas Hammer Pain y su épico blog me han concedido por segunda vez este premio, por lo cual estoy muy agradecido.
Paso a nominar a otros fantásticos quince blogs y responder a algunas preguntas para así recoger el premio.
Lucia UO www.mishumildesopiniones.com/
Jose Baena
http://jbaenac.blogspot.com.es
Hilda
Hurtado http://hildahurtadohistorias.blogspot.com.es/
Federico Rivolta
relatosfr.blogspot.com/
Miguel Costa
miguelcostatovar.blogspot.com/
Nahuel Herrera
lashistoriasdeexcalfing.blogspot.com/
Isabel P. Salas
isabelpsalas.blogspot.com
Diana Pinedo Ortega
http://grafema11.blogspot.mx/
Jordi Luna
http://poemasdesdemiventana.blogspot.com.es
Alejandra Sanders
cuentosdeterroryprofeciasalejandra.blogspot.com
Esteban
Acosta elcirculofungico.blogspot.com
Jose
Ayllón elblogdeay.blogspot.com.es
Elena
García Domingo http://enpalabras-yo.blogspot.com.es
Jorge
Iglesias http://gallegorebelde.blogspot.com.es/
1.- ¿Libro favorito? Hacedor de estrellas.
2.- ¿Qué libro llevarías a una isla? Fundación.
3.- ¿Adaptación cinematográfica preferida? 300.
4.- Describe tu blog con tres palabras. Tinta, carboncillo, música.
5.- ¿Qué personaje literario te gustaría ser? Lord Eddard Stark.
6.- ¿Qué autor es de tu preferencia? Isaac Asimov.
7.- ¿Has conocido a algún autor? Ibañez en un salón del cómic.
8.- ¿Película favorita? Kamikaze.
9.- ¿Tu música preferida? ¡De todo!
10.- ¿Tu ideal de un día perfecto? Lluvia y viento. Y ella <3
11.- ¿Un lugar que quisieras conocer? Nueva Zelanda.
Eso es todo.
¡Felicidades a los nominados!
Premio Best Blog
¡Saludos!
Gentileza de Tulkas Hammer Pain y su excelente blog recojo este premio.
Paso a recomendar quince magníficos lugares y responder a algunas preguntas...
Lucia UO www.mishumildesopiniones.com/
Jose Baena
http://jbaenac.blogspot.com.es
Hilda
Hurtado http://hildahurtadohistorias.blogspot.com.es/
Federico Rivolta
relatosfr.blogspot.com/
Miguel Costa
miguelcostatovar.blogspot.com/
Nahuel Herrera
lashistoriasdeexcalfing.blogspot.com/
Isabel P. Salas
isabelpsalas.blogspot.com
Diana Pinedo Ortega
http://grafema11.blogspot.mx/
Jordi Luna
http://poemasdesdemiventana.blogspot.com.es
Alejandra Sanders
cuentosdeterroryprofeciasalejandra.blogspot.com
Esteban
Acosta elcirculofungico.blogspot.com
Jose
Ayllón elblogdeay.blogspot.com.es
Elena
García Domingo http://enpalabras-yo.blogspot.com.es
Jorge
Iglesias http://gallegorebelde.blogspot.com.es/
1.- ¿Libro favorito? Hacedor de estrellas.
2.- ¿Qué libro llevarías a una isla? Fundación.
3.- ¿Adaptación cinematográfica preferida? 300.
4.- Describe tu blog con tres palabras. Tinta, carboncillo, música.
5.- ¿Qué personaje literario te gustaría ser? Lord Eddard Stark.
6.- ¿Qué autor es de tu preferencia? Isaac Asimov.
7.- ¿Has conocido a algún autor? Ibañez en un salón del cómic.
8.- ¿Película favorita? Kamikaze.
9.- ¿Tu música preferida? ¡De todo!
10.- ¿Tu ideal de un día perfecto? Lluvia y viento. Y ella <3
11.- ¿Un lugar que quisieras conocer? Nueva Zelanda.
Eso es todo.
¡Felicidades a los nominados!
lunes, 22 de diciembre de 2014
Mago: Bastón
Imagen alojada en:
Para leer la obra completa sigue el siguiente enlace
El viejo Vulcany apartaba de modo
quejumbroso las ramas que salían a su paso en el mismo centro de la
espesura del bosque.
Había pasado buena parte de su vida
viviendo como ermitaño en esas tierras y curiosamente apenas podía
afirmar conocer la mitad de ese territorio. Ahora vagaba sin rumbo en
busca de una respuesta al mal que lo acechaba. Pues estaba muy
enfermo.
La tos de Vulcany se intercalaba con
una dificultosa respiración de muy mal aspecto. Toda una vida al
servicio de la naturaleza había instaurado en el interior del
anciano la certeza de que, de algún modo, el bosque le protegía.
Por eso cuando esa mañana había deducido que no pasaría de ese
día, se atavió con su túnica marrón y su sombrero para
aventurarse al desconocido interior del bosque en busca de una
resolución. Un milagro o una condena.
Su largo pelaje que se confundía con
una poblada barba, grisácea y descuidada, caía sobre su mirada
confundiendo un paisaje que ya se difuminaba dado su lamentable
estado de salud. Le fallaban las fuerzas cuando, de pronto, vio una
luz cerca de él. Una pequeña luz que se movía en espirales y
emanaba más colores de los que jamás pudo imaginar Vulcany.
Sin dudarlo, hizo uso de sus últimas
fuerzas para seguirla.
No obstante, al llegar a un claro
cercano a un bello riachuelo, la luz se desvaneció. Más bien tocó
tierra difuminándose.
Suspirando, Vulcany se sentó en un gran
pedrusco humedecido por las cristalinas aguas perdiendo la vista en
la zona donde la luz había cesado su espectáculo. Fue entonces
cuando lo vio.
En esos bosques no era raro encontrar
todo tipo de caprichos de la naturaleza, pero el viejo nunca había
dado con nada parecido a lo que tenía justamente ante sí. Se
trataba de un bastón perfectamente tallado. La belleza de su cálida
madera, coronada en uno de los extremos por una bella figura
semejante a un lobo, lo dejó como hipnotizado. Era imposible que el
azar hubiese producido semejante pieza, pensó.
Emitiendo un sonoro quejido, se
incorporó y cogió el bastón.
Nunca se había sentido más joven. De
pronto comenzó a respirar a las mil maravillas y sin dudarlo llenó
sus pulmones y los vació varias veces gratamente sorprendido por el
alivio. Sintió como sus músculos se fortalecían y un magnífico
vigor le inundaba por dentro. No dudó en acercarse al río para
contemplar su reflejo, sorprendiéndose no por sus facciones,
idénticas a las de esa misma mañana, sino porqué el pico caído de
su sombrero se encontraba ahora erguido y su pelaje se había tornado
mucho más canoso, prácticamente blanco.
– Anciano, ¿Cómo te llamas? – La
voz provenía de todas partes, era como si el mismo bosque le
estuviese hablando.
– Mi nombre es Vulcany. – Respondió
el anciano apoyándose en su bastón.
– Este regalo lleva asociada una
larga vida, Vulcany. Serás mi protector. El protector de los bosques.
No me ha pasado desapercibida la vida que me has regalado, por lo
cual te otorgo el bastón del mago. – Vulcany frunció el ceño al
escuchar esas palabras.
– ¿El bastón del mago? – Tanteó
en busca de una explicación, pero no hubo respuesta.
El silencio reinó de nuevo el
enigmático paraje, tan solo interrumpido por el bello sonido del
riachuelo completando su recorrido eterno.
Vulcany miró el bastón, recordando la
enigmática fuente de luz que lo había bañado minutos antes.
Contemplando el grabado del lobo, escuchó un rugido cerca de él,
acompañado del lento sonido de ramas aplastadas.
Poniéndose en guardia, clavó su vista
en dirección al sonido, asistiendo petrificado a la visión de un
enorme lobo negro mostrando sus temibles fauces acercándose muy
lentamente hacia él.
Apenas le dio tiempo de reaccionar. El
lobo saltó hacia su posición mostrando su mismísima garganta de lo
mucho que abría la boca, clavando sus ojos rojos en la garganta de
un asustado Vulcany.
Instintivamente, alzó el bastón y
gritó.
Un piano entre cadáveres
Un piano entre cadáveres:
Extractos musicales del film "La novia cadáver" de Tim Burton.
El dueto de piano en especial no tiene desperdicio.
domingo, 21 de diciembre de 2014
La musa en paraje hostil
Rehaciendo un territorio maltrecho en
mi mente,
no puedo evitar sentir su desolación
en mi corazón.
Me esfuerzo contracorriente en renovar
su paisaje,
sus verdes bosques que lucen todo tipo
de vegetación,
su clima que antaño era cálido...
Y hoy es frío, hostil y dolido en su
interior.
Recorro mentalmente su maltrecha
llanura,
exenta ya de vida por la época del
incendio,
siendo inmune a la lluvia de la pena,
al llanto de mi musa.
Cuánto costará restaurar mi ansiada
vida,
cuánto más debo caminar para respirar
ante una salida,
si los vientos me arrebatan la
esperanza,
a cada una de sus acometidas.
Quiero vencer al fantasma de mi pasado,
necesito plantarle cara pero se muestra
esquivo,
vive en el corazón enfermo de mi musa,
apagando la hoguera,
tornando sus llamas moribundas...
Difusas.
Me pregunto dónde estará ella, qué
sentirá ahora,
en el dulce reino desolado,
vive encarcelada mi musa.
Desterrada de mi abrazo,
lejana a mi calor,
solo me queda este juego,
esta vida que aprieta el gatillo
constantemente,
sin poder ver que se trata de una
ruleta rusa.
Descuidando la hoguera
Encerrado en una oscura cabaña apenas
iluminada por alguna vela, un hombre fumaba su pipa inundando el
ambiente de una espesa capa de humo.
La hoguera se había apagado hacía
rato, quedando frías incluso las brasas de lo que antaño conformaba
un espectáculo de fuego, luz y calor.
Frente a él, un tintero ya vacío, y
un papel en blanco roído por los costados frente al cual el hombre
permanecía en silencio, muy concentrado y sumido en sus
pensamientos.
Fuera la noche cerrada daba paso a los
primeros signos de un nuevo amanecer.
El frío era intenso en esa época del
año, y pese a que al hombre eso le encantaba, apenas había recogido
por el camino un puñado de leña para alimentar a su hoguera.
No era lo que le importaba.
Había acudido a la cabaña para
reflexionar acerca de algo sumamente importante, algo que le cegaba
el juicio hasta el punto de no caer en la cuenta de que las ramas
húmedas que había recolectado no solo tardarían en arder, sino que
se consumirían bien pronto.
Ahora tiritaba y chasqueaba sus dientes
pluma en mano.
De pronto las lágrimas hicieron acto
de presencia humedeciendo su mirada e, impasible, sintió como las
primeras resbalaban por su rostro hasta caer en cascada al tintero
vacío.
No se lo pensó, siéndole indiferente
el hecho de que dado transparente tonalidad apenas dejarían rastro
en el papel de cuanto quisiese plasmar, opinar o simplemente dejar
ir.
Se incorporó de inmediato, aún con el
rostro empapado y escribió.
Rehaciendo un territorio maltrecho en
mi mente,
no puedo evitar sentir su desolación
en mi corazón.
Me esfuerzo contracorriente en renovar
su paisaje,
sus verdes bosques que lucen todo tipo
de vegetación,
su clima que antaño era cálido...
Y hoy es frío, hostil y dolido en su
interior.
Recorro mentalmente su maltrecha
llanura,
exenta ya de vida por la época del
incendio,
siendo inmune a la lluvia de la pena,
al llanto de mi musa.
Cuánto costará restaurar mi ansiada
vida,
cuánto más debo caminar para respirar
ante una salida,
si los vientos me arrebatan la
esperanza,
a cada una de sus acometidas.
Quiero vencer al fantasma de mi pasado,
necesito plantarle cara pero se muestra
esquivo,
vive en el corazón enfermo de mi musa,
apagando la hoguera,
tornando sus llamas moribundas...
Difusas.
Me pregunto dónde estará ella, qué
sentirá ahora,
en el dulce reino desolado,
vive encarcelada mi musa.
Desterrada de mi abrazo,
lejana a mi calor,
solo me queda este juego,
esta vida que aprieta el gatillo
constantemente,
sin poder ver que se trata de una
ruleta rusa.
El hombre quiso entonces romper el
papel, hacerlo trizas, pero en lugar de eso clavó sus codos a sus
costados y sollozó amargamente hasta que no pudo más.
De pronto, el canto de un pájaro hizo
que alzase la vista y mirase al exterior.
Era de día, ya había amanecido y cayó
en la cuenta del frío intenso que hacía en el interior de la
cabaña.
Pensó en mundos de fantasía sin fin
que coloreaban experiencias pasadas lúgubres como una noche
moribunda y sin vida. Pensó en cuanto había estado haciendo, y de
inmediato se levantó de la mesa mirando por última vez sus palabras
escritas con lágrimas, que ya se desvanecían sin dejar rastro.
Salió al exterior y sintió alivio al
notar la luz del día bañando su rostro, mientras los primeros copos
de nieve acariciaban sus mejillas.
Era Navidad, esa época en la que se
dice que existe, si cabe, una esperanza y una ilusión mayores de las
que se suelen lucir el resto del año.
Lo primero, pensó, era alimentar la
hoguera. Ventilar la cabaña.
Su hogar era cosa suya y no necesitaba
demasiado para poder estar a gusto.
El recuerdo de la musa perdida lo
golpeó una vez más, pero era consciente de que ya no podía hacer
nada más, no podía seguir descuidando lo más importante.
En el juego de la ruleta rusa no
puedes agotar todos los disparos, y el hombre tenía la sensación de
que había estado jugando con fuego mucho tiempo.
Mientras se dirigía hacia el bosque
más cercano para coger un buen cargamento de leña, miró a su
alrededor y vio como ese paisaje nevado era algo digno de volver a
ser disfrutado una vez más.
Como siempre pensó, lo único que le
faltaba era una buena y cálida luz de esperanza, tinta y papel.
Mundos de fantasía golpeaban su cabeza
mientras nuevas experiencias se tejían en el horizonte del futuro.
Sonrió.
Era una combinación que sabía solo se
producía muy de vez en cuando, siempre que la amenaza de una oscura
sombra y la promesa de una cálida luz se aliaban para decorar un
desolado paisaje que el hombre suspiraba por poder reconstruir.
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